Ensayo filosófico
El amor es algo muy concreto, muy preciso, muy delicado: es una obra de ingeniería, es decir, tiene unos fundamentos muy precisos y requiere de una adecuada tarea de mantenimiento.
A mi pesar, la vida no es un simple enlace entre mente y sentimientos.
La mente es materia pensante, neuronas que asocian y disocian toda idea, concepto y pensamiento; qué es entonces el sentimiento que tanto aferramos al corazón, cual se cansa de tanto bombear sangre hasta la intima parte de nuestro ser. Todos sentimos, pero ¿Qué sentimos? ¿Qué es sentir? ¿Qué es un sentimiento?
Si tuviéramos que encontrar una respuesta, creo que nunca llegaríamos a una definición fija.
Los filósofos dicen que, lo que sentimos, es aquello que nuestra mente produce como un estimulante al cuerpo, algo que lo hace moverse hacia las más perversas reacciones, o a las más pacíficas estaciones.
Los científicos en cambio, resuelven dichas ideas definiendo que somos hechos de pensamiento y sentimiento. Sentir es creer, percibir, un cúmulo de sensaciones que nos hacen madurar y a su vez renacer en un ambiente de absurda niñez.
A mi ver, las ideas se esparcen a gran velocidad, recogiendo cada esencia en el más bonito aroma.
Dichas reflexiones, hacen que nos perdamos al formular el significado del sentimiento, es algo que no podemos ver, algo entonces asignado a la mente, pero equivocados, lo enlazamos de manera involuntaria al corazón.
Esta invisible idea, es lo que afecta nuestro ser, la cual no importa su gravedad, se expande de tal manera, que no podemos demostrar su existencia; se relaciona con lo familiar, con lo intocable, con todo lo infinitamente lejano.
Según algunos, el amor es el pensamiento más maravilloso que Dios nos ha dado derivado de una mente limpia y pura.
Pues bien, hay que comprender que por muchas relaciones entre mente y sentimiento, el amor, es la atracción más fuerte que existe entre ambas.
Y el corazón no es la fuente del amor como muchos creen, sino el causante de las sensaciones y reacciones físicas que tenemos al experimentar dichos sentimientos.
Volviendo al amor, a lo que significa, bien es cierto que es un sentimiento hacia otra persona que desea su bien. Pero no lo confundamos con el "enamoramiento". Habitualmente se suelen entrelazar ambas palabras.
Hay diferencias notables entre ambas. El amor sí es eterno, o para siempre, mientras que en el enamoramiento es temporal. Esa pasión desmedida, tan fuerte e incontrolable.
En el enamoramiento, uno ve a la persona amada como ideal, la coloca en las alturas y la observa perfecta desde el pedestal. Mientras que en el amor, no hay esa idealización, ni la persona es tan perfecta, si no que se ven los defectos de ella y se aceptan.
Teniendo claras estas diferencias, podemos deducir que el enamoramiento es amor también, pero es sólo una fase de este.
Se obtiene por conclusión, que en definitiva, tanto los sentimientos como la razón son interdependientes y, por eso, tenemos una parte racional y otra sentimental, las cuales podemos afirmar.
Por lo tanto es necesario comprender como influyen en nosotros estos factores de forma independiente y el uno con el otro en armonía, para así aceptar que somos seres compuestos que nos diferenciamos de animales y máquinas por tener las cualidades de ambos.
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